viernes, 28 de mayo de 2010

Cierren los ojos antes de hablarme.

No ahorraré lágrimas. Con la mano extendida, aguardando ya sin calma a que alguien me sujete, me levante, me (re)afirme. Y cada vez que cierro lo ojos veo mis ilusiones, lástima que cada vez se alejen más y más. Pero aun así, cuando miro al cielo me puedo ver saltando de nube en nube, porque allá tan lejos, allá tan alto aún puedo soñar y perderme y viajar y jamás volver. Pronto aterrizo, como siempre forzosamente; es cierto que soy ingrata del suelo que me aguanta las patadas, esque el viento es más dueño de mi que yo misma. ¿Quién? ¿Quién me hizo la cabeza tan resisitente, ya intenté con un millón de agujas, alfileres, y cosa puntiaguda, pinchuda y nada, no logro reventarla? Es inutil escapar de ti mismo, es inutil sin caer en la demencia, que cada día siento más cercana.

domingo, 2 de mayo de 2010

Enredos

Cuando la burocracia solo estorba a las desiciones ya tomadas.