domingo, 19 de abril de 2015

Estoy enamorada

Estoy enamorada.
Estoy enamorada de la vida.
Estoy enamorada de vivir.
Estoy enamorada de gritar y de reír a boca llena, de la risa con locura. Estoy enamorada de mis amigos, de los estúpidos que me dejan saltarles encima, llenarlos de besos y que me siguen en las propuestas más absurdas. Estoy enamorada de mis otros amigos también, de los serios, que me regalan mesura, que me quieren aunque mi inadaptación y rebeldía exceda su cordura. Estoy enamorada de mi familia que me mira, suspira y sonríe, que me llena de amor. Estoy enamorada del cielo, cuando amanece y me regala el privilegio de ver la aurora, cuando llega el crepúsculo, cuando nubecitas de algodón lo atraviesan, cuando nubes que parecen colchones aguardan mis saltos, cuando se llena de arreboles, cuando está estrellado y cuando es tan oscuro e infinito que te absorbe. Estoy enamorada de la naturaleza linda, libre y amplia, de los paisajes sagrados. Estoy enamorada de las ventanas, que me llenan de sueños e ilusiones. Estoy enamorada de las hojas bailando al ritmo del viento, jugando a casi soltarse, a casi caer, pero no. Estoy enamorada de la ciudad y su ruido y su olor medio muerto y sus gentes y su velocidad feroz. Estoy enamorada de los vuelos, del fierro enterrándose en la piel, del cuerpo amoratado, de las manos rojas de felicidad y adrenalina. Estoy enamorada de cada vez que se me sale el corazón por la nariz, le salen alas y lo inunda todo. Estoy enamorada de mi cuerpo perdido en el baile, extasiado, adolorido, sudado, agotado y vivo, tan vivo.
Estoy enamorada de la vida, de vivir.
Estoy enamorada de estar enamorada...