domingo, 27 de diciembre de 2015

Un manojo de recuerdos

Deambulando tenía la cabeza cuando me encontré con el corazón apretujado queriendo arrancarse del pecho. Nunca he puesto mucha atención a los recobecos por los que se mete mi cabecita loca, que casi siempre se me va volando más allá de lo que puedo alcanzar. Yo la dejo, que vaya, que venga, que se me pierda. Hace un rato ya que me asumí perdida y despistada.
Pero a veces se me pierde y me deja tirada justo al medio de una maraña de sentimientos revueltos y entrecortados.
Es que hay días que la nostalgia me puede más. Que la inseguridad me abofetea. Y quedo tirada.
Me hizo falta tu mano en el pecho y tus ojos de miel asegurandome que todo va a estar bien. Me han hecho falta las noches eternas de luz azul.
Lo recuerdos, que pensé que ya no existían -porque todos saben que olvido todo y fácil-, se me cayeron encima. Se me cayeron junto con unas cuantas lágrimas.
Es que a veces se me pierde la cabeza y me deja en lugares incómodos. Pero ya me desenterré, me sacudí y me llevé a lugares más luminosos, para seguir soñando con arreboles y perderme, pero ahora sí, entre mis cielos y nubes.

domingo, 19 de abril de 2015

Estoy enamorada

Estoy enamorada.
Estoy enamorada de la vida.
Estoy enamorada de vivir.
Estoy enamorada de gritar y de reír a boca llena, de la risa con locura. Estoy enamorada de mis amigos, de los estúpidos que me dejan saltarles encima, llenarlos de besos y que me siguen en las propuestas más absurdas. Estoy enamorada de mis otros amigos también, de los serios, que me regalan mesura, que me quieren aunque mi inadaptación y rebeldía exceda su cordura. Estoy enamorada de mi familia que me mira, suspira y sonríe, que me llena de amor. Estoy enamorada del cielo, cuando amanece y me regala el privilegio de ver la aurora, cuando llega el crepúsculo, cuando nubecitas de algodón lo atraviesan, cuando nubes que parecen colchones aguardan mis saltos, cuando se llena de arreboles, cuando está estrellado y cuando es tan oscuro e infinito que te absorbe. Estoy enamorada de la naturaleza linda, libre y amplia, de los paisajes sagrados. Estoy enamorada de las ventanas, que me llenan de sueños e ilusiones. Estoy enamorada de las hojas bailando al ritmo del viento, jugando a casi soltarse, a casi caer, pero no. Estoy enamorada de la ciudad y su ruido y su olor medio muerto y sus gentes y su velocidad feroz. Estoy enamorada de los vuelos, del fierro enterrándose en la piel, del cuerpo amoratado, de las manos rojas de felicidad y adrenalina. Estoy enamorada de cada vez que se me sale el corazón por la nariz, le salen alas y lo inunda todo. Estoy enamorada de mi cuerpo perdido en el baile, extasiado, adolorido, sudado, agotado y vivo, tan vivo.
Estoy enamorada de la vida, de vivir.
Estoy enamorada de estar enamorada...

lunes, 26 de enero de 2015

locura, mi locura

tengo una locura adentro, sellada en el corazón
que a veces cuando te hablo se acelera
que a veces cuando me pierdo me carcome
que a veces juega a la dormida
y en un abrazo me explota
tengo una locura a dentro, sellada en el corazón
que me sigue a todos lados
y yo la acuno y le canto una canción